Test drive

Kia Sportage 2017: Prueba de manejo

Para sacudir el segmento de los SUV compactos

Kia Sportage 2017: Prueba de manejo

Antecedentes

Kia Sportage 2017 es un modelo totalmente nuevo que debutó el año pasado, en el marco del Auto Show de Frankfurt.

Esta cuarta entrega se vale de un diseño exterior sumamente agresivo que no podemos negar, tiene notables similitudes con el Porsche Macan, así como un salto cuántico en términos de equipamiento y materiales en el interior para mantener e incluso acelerar el éxito de Kia.

Características técnicas y mecánicas

Bajo el capó encontramos un motor de cuatro cilindros y 2.4 litros de Inyección Directa que entrega 181 hp y 175 lb-pie de torque y que se acopla a una transmisión automática de seis velocidades con paletas de cambio detrás del volante que en este caso, al ser la versión tope de gama envía la potencia a las cuatro esquinas vía un sistema de tracción integral con bloqueo central de diferencial.

Para las versiones superioe, el motor es de 2.0 litros turbo con 240 hp y 260 libras-pie de torque también acoplado a una caja automática de seis relaciones. Asimismo, existen probabilidades de que en el futuro arribe la motorización turbo de 2.0 litros con 240 hp y 260 lb-pie para ubicarse en la parte más alta de la categoría.

Respecto a las medidas, esta nueva generación es 1.6 pulgadas más larga que su antes. Este incremento permitió a los ingenieros colocar los ejes los más lejos posible por lo que la distancia entre las ruedas delanteras y traseras es de 1.2 pulgadas. De esta forma, la carrocería ahora mide 176.4 pulgadas de longitud, 73 pulgadas de ancho, 64.8 pulgadas de alto, mientras que la distancia entre ejes es de 105.1 pulgadas.

En materia de seguridad encontramos 6 bolsas de aire, ABS, ESP y Cámara de reversa.

Confort

Un aspecto sorprendente es la excelente habitabilidad en la banca trasera.

El interior nos recibe con una calidad de materiales y ensamble en verdad sobresalientes con la salvedad de un casi imperceptible rechinido proveniente del inmenso techo panorámico. Las superficies son suaves al tacto, todos los botones y controles transmiten solidez. Destaca también el hecho de que encontramos un tablero repleto de botones, algo poco común en nuestros tiempos en que ya sea mediante mandos centralizados o por pantallas táctiles se han ido eliminando.

En el centro del tablero encontramos una pantalla táctil de 8 pulgadas que alberga un sistema de info – entretenimiento denominado UVO que es compatible con Apple Carplay y Android Auto. Asimismo ofrece interfaz bluetooth para teléfonos móviles y navegador.

Otros elementos que vale la pena señalar son el acceso y arranque mediante llave inteligente, freno de mano eléctrico, climatizador automático bizona y como ya había mencionado, un gigantesco techo panorámico.

Un aspecto sorprendente es la excelente habitabilidad en la banca trasera, tanto que esa diferencia en contra que tiene la Sportage en relación con sus competidoras en materia de longitud total, no se percibe en absoluto. Esto se debe a que esta nueva generación es 4 cm más larga que antes, lo que permitió a los ingenieros colocar los ejes lo más lejos posible, por lo que la distancia entre las ruedas delanteras y traseras es 2.2 pulgadas mayor, una ganancia que beneficia casi en su totalidad a los pasajeros posteriores. 

Manejo

La Sportage se siente ágil y briosa.

Adicionalmente, la Sportage 2017 se planta muy bien en el camino, es muy predecible y puede atacar caminos sinuosos con mucha confianza, esto se debe a una buena calibración de la dirección de asistencia eléctrica, así como de la suspensión que no es demasiado suave y que cuenta con geometría McPherson adelante y Multilink atrás. Adicionalmente, el sistema de tracción integral brinda todavía mayor confianza al repartir adecuadamente el torque entre ambos ejes.

Otra característica digna de mención es el funcionamiento de la transmisión, si bien es cierto no es la más rápida al momento de efectuar los cambios, estos se realizan de manera tan suave que a veces la única manera de notarlo es observar cuando cae la aguja del tacómetro. Adicionalmente, las paletas detrás del volante permiten controlar mucho mejor la potencia cuando manejamos en caminos con curvas.

Obviamente que cuando se elige con la versión con tracción en las cuatro ruedas provisto por un sistema Dynamax Intelligente All Wheel Drive disponible para las tres versiones, tenemos claras ganancias en materia de estabilidad. Por medio de dicho sistema, se reparte la fuerza entre ambos ejes de manera oportuna para entregar una conducción más segura y eficiente.

Si acaso, donde el Kia Sportage  queda a deber es en la caja de seis velocidades, tal vez hubiera sido una buena mancuerna para el motor turbo, la transmisión de doble embrague de siete cambios para un trabajo más eficaz.

Otro componente que también recibió mejoras en aras de entregar un mejor desempeño es la dirección eléctrica, que obtuvo algunas modificaciones en el software para ofrecer más suavidad al girar el volante. Además de lo anterior esta cuarta generación del Sportage recibe frenos de disco de mayor tamaño -7 por ciento adelante y 6 por ciento atrás- en relación con su predecesor.

Precios y versiones

 

Sportage LX

2.4L I4 (FWD)

$22,990

Sportage EX

2.4L (FWD)

$25,500

Sportage LX

2.4L (AWD)

$24,490

Sportage EX

2.4L (AWD)

$27,000

Sportage SX Turbo

2.0L Turbo (FWD)

$32,500

Sportage SX Turbo

2.0L Turbo (AWD)

$34,000

 

 

Rubén Hoyo recomienda