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Los autos japoneses que valen más gracias a Fast and Furious

Cada día que pasa, estos modelos ven un aumento en su precio.

Los autos japoneses que valen más gracias a Fast and Furious

Aunque la cultura del tuning ha existido desde hace algunas décadas, principalmente en muscle cars, deportivos alemanes y súper autos, fue hasta la aparición de la franquicia "The Fast and The Furious", en 2001, que la cultura por la personalización de automóviles japoneses tuvo un boom impresionante.

Esta popularidad por la película además de ayudar a crear un nuevo sector en el mercado de los coleccionistas de autos, ha permitido que los modelos japonés experimenten un crecimiento constante en su valor.

De la misma manera que los autos coleccionables tradicionales, los modelos de Nissan, Mazda y Toyota que han aparecido en la saga, han visto una gran demanda debido a que se han convertido vehículos de culto.

A continuación, presentamos algunos de los autos que The Fast and The Furious popularizó y que crecieron constantemente en demanda y valor desde su aparición en la pantalla grande.

Mazda RX-7

Cuando era nuevo, el Mazda RX-7 1993 tenía un valor aproximado de $33,000 dólares. En 2005, el Mazda RX-7 1993 usado en la película se vendió por la respetable suma de $40,250 en una subasta de Bonhams. De ahí a la fecha, los precios han seguido subiendo desde entonces ya que un RX-71993 puede valer $59,000 dólares, incluso sin ser el modelo que apareció en la película.

Toyota Supra

Pocos automóviles de la película original han visto el explosivo crecimiento en valor como el Toyota Supra. En 1995, un Supra habría costado poco menos de $50,000 dólares. Hoy, un ejemplar promedio puede valer $70,000 dólares. Cuando se trata del Supra 1993 manejado por Paul Walker en la película este fue vendido por $185,000 dólares en 2015.

Cabe mencionar que los Supras que comandan la mayor cantidad de solicitudes son completamente de stock y de poco kilometraje, lo que significa que probablemente no hayan participado en muchas carreras callejeras.

Erróneamente, los propietarios creen que, debido a que han agregado $50,000 dólares en modificaciones al Supra, finalmente vale $100,000 dólares, sin embargo, los costos más altos solo ocurren cuando las modificaciones se realizan de manera adecuada. Así, un Toyota Supra original de bajo kilometraje de 1994 puede valer $90,000 dólares.

Acura Integra GS-R

Este nipón es uno de los autos de tuning más accesibles que aparecen en la película. Cuando es nuevo, el automóvil vale alrededor de $20,000 dólares y los precios se han mantenido constantes, ya que la mayoría hoy en día están llegando $15,000 dólares.

Nissan 240SX

Al día de hoy, todavía se pueden comprar ejemplares baratos, con versiones en existencia extremadamente raras, ya que la mayoría de los modelos S13 y S14 originales han sido modificados para el drifting o ajustados para parecerse más a los de la película. Un 240SX promedio vale cerca de $18,000 dólares.