Test drive

Porsche Panamera Turbo S E-Hybrid 2018: Prueba de manejo

Cero ruido y emisiones o el rugido de un V8 y aceleraciones brutales, tu escoges

Porsche Panamera Turbo S E-Hybrid 2018: Prueba de manejo

 

 

Un viejo conocido

En Autocosmos tenemos una estrecha relación con la segunda y actual generación del Panamera, inicialmente tuvimos oportunidad de conocerlo de primera mano en el lanzamiento internacional en Munich hace un par de años, donde estuvieron disponibles para manejar las versiones S y Turbo.

Unos meses después, tocó ir a Ciudad del Cabo en Sudáfrica a manejar la variante E-Hybrid y poco más tarde fuimos a Miami a manejar con mayor profundidad el Panamera Turbo y de manera simultánea lo teníamos a prueba. Por si fuera poco, este año manejamos en Alemania la interesante configuración wagon, denominada Sport Turismo, también en versión Turbo, para dar rienda suelta en las Autobahns, esos 550 hp.

En resumen, lo conocemos más que bien, pero faltaba la joya de la corona, la versión más extrema, misma que por primera vez recurre a un tren motor híbrido para lograr el mejor performance posible el Turbo S E-Hybrid.

Turbo S E-Hybrid = V8 turbo + Motor eléctrico

El ver inscrita en la parte trasera de cualquier Porsche la leyenda Turbo S es suficiente motivo para emocionar a cualquiera, se trata de una versión todavía más poderosa y rápida en comparación con los ya de por sí tremendos “Turbo”.

En este caso, significa que al V8 de 4.0 litros con 550 hp y 567 lb-pie de torque se le suma un motor eléctrico que entrega 136 hp y 295 lb-pie de torque, para lograr así unos impresionantes 680 hp y 626 lb-pie que son gestionados a las cuatro ruedas vía una caja PDK de doble clutch y ocho velocidades.

Lo anterior y pese a que el Panamera Turbo S E-Hybrid es pesadísimo, 2,385 kilos para ser exactos, pues la batería de iones de litio de 14.1 kWh suma, y bastante. Aún con lo anterior, esta limusina de cinco metros es capaz de acelerar de 0 a 62 mph (100 km/h) en apenas 3.4 segundos y seguir empujando con fuerza hasta 192 mph (310 km/h).

Al mismo tiempo, al seleccionar el modo de manejo eléctrico, es capaz de entregar 31 millas -50 km (teóricos)- de conducción 100% eléctrica, silenciosa y libre de emisiones. Con lo cual y suponiendo un trayecto de 9 millas -15 km- de casa a oficina, este Panamera podría funcionar diariamente sin quemar una sola gota de gasolina.

Buena parte de las tecnologías que incorpora tienen la misión de lograr que este super sedán se mueva como un deportivo de altos vuelos, aun cuando pesa bastante más de dos toneladas, la tracción integral, suspensión neumática ajustable y el gigantesco sistema de frenos carbono – cerámico con pinzas de diez pistones adelante son algunos de ellos, además de una serie de sistemas electrónicos hacen un trabajo impecable.   

Cuando seleccionas el modo Sport, no solo ambas motorizaciones se conjugan para entregar aceleraciones de infarto y dignas de un salto al hiper espacio, sino que el resto de los componentes, incluido también el eje trasero direccional, transforman al silencioso y refinado sedán en una bestia capaz de seguirle el paso a exóticos deportivos biplaza fabricados en materiales ligeros, el Panamera Turbo S E-Hybrid frena, se agarra y da vuelta como los mejores, de eso no queda duda.

Por otro lado, en modo eléctrico y con la suspensión en modo confort, es tan silencioso, suave y refinado como un Bentley o Rolls-Royce, un sedán de lujo del más alto nivel. El modo de manejo híbrido además permite extraer rendimientos que no son alcanzables ni por un Prius, y es que al tener una batería tan grande, en esta modalidad se gestiona la utilización de la energía generada de ambas plantas de poder para extraer la mayor eficiencia. Según Porsche, la cifra se ubica en 77 mpg -33 km/l- y aunque sabemos que son números que se logran únicamente en condiciones ideales, aún con un 20% menos estaríamos hablando de 63 mpg -27 km/l-, nada mal para un inmenso sedán de 2.3 toneladas y cinco metros.

Como en primera clase

Al interior nos encontramos con una cabina prácticamente perfecta, todo lo que ves y tocas tiene la mayor atención al detalle y utiliza materiales de la más alta calidad, el cuero, insertos en madera, fibra de carbono o cualquier cosa que elijas son exquisitos.

Adicionalmente, el Panamera ofrece una cabina llena de tecnología y que genera una sensación de modernidad y buen gusto, la pantalla táctil de 12” permite controlar todas las funciones del vehículo, así como la navegación, audio, teléfono y un sinfín de aplicaciones adicionales que se pueden descargar del market place de virtual de la marca.

El cluster de instrumentos típico de Porsche está presente, con el gran tacómetro al centro que por cierto sigue siendo análogo, pero que ahora está flanqueado por dos pantallas de alta resolución desde donde se puede consultar cualquier información, como rendimiento del sistema híbrido, estatus de la batería, sistema de visión nocturna, navegación, computadora de viaje etc.

En la parte de atrás, que es solo para dos ocupantes se viaja tan bien como adelante, aun con la caída del toldo tipo coupé, el espacio es bastante bueno. Adicionalmente gracias a la pantalla táctil, los pasajeros posteriores pueden controlar el clima de todo el auto (las cuatro zonas), el audio y algunas cosas más.

Lo mejor de ambos mundos

Lo que más sorprende acerca del Panamera Turbo S E-Hybrid es lo capaz que es como auto deportivo considerando su tamaño y masa, y que al mismo tiempo y con solo cambiar algunos ajustes pueda ser un auto de súper lujo extremadamente suave, silencioso y cero emisiones. Es cierto que esa dualidad entre comodidad y deportividad ha venido mejorando conforme han llegado la electrónica o las suspensiones ajustables en los autos de alta gama en los últimos años, pero este super sedán híbrido de Porsche lleva el concepto a nuevos niveles, en definitiva, un triunfo de la ingeniería alemana y una referencia para toda la industria.