Mientras que para algunos llevar el carrito del supermercado es diversión pura, para otros resulta todo un reto. Y es que para los papás resulta muchas veces complicado que sus hijos estén bien acomodados o bien para los niños más grandes, que estos conduzcan con seguridad no rompiendo cosas o golpeando a las personas en caso de que tomen el mando de uno de los carritos. Al final, es como si los pequeños estuvieran al volante de un automóvil, y los pasillos del supermercado son su circuito de carreras.
Teniendo en cuenta que esto es muy común en las visitas de los niños al supermecado, Ford ha ideado un método para eliminar incidentes al ir a la compras, inspirándose en su tecnología que ayuda a los conductores a evitar accidentes en la carretera.
Utilizable en ciertos modelos Ford, el Asistente Precolisión utiliza una cámara y un radar en la parte delantera para detectar vehículos, peatones y ciclistas en el camino, en caso de que este sistema descubra alguno de ellos, activa automáticamente los frenos si el conductor no responde a los avisos.
Siguiendo esta tecnología, el "carrito con freno automático" utiliza un sensor para lograr un resultado similar: escanea su zona frontal en busca de personas y objetos y activa automáticamente los frenos cuando se detecta un posible choque.
Por ahora, el "carrito con freno automático", solo un prototipo, forma parte de la serie Ford Interventions, que utiliza tecnologías de impuestas en el automóvil para resolver problemas del día a día a los que todos nos enfrentamos.
Ford pone freno automático a los "carritos" del supermercado